En
1924 un médico británico estableció una relación entre el asbesto
y una enfermedad pulmonar -asbestosis- después de realizar autopsias
a trabajadores del asbesto o amianto. Estudios posteriores
confirmaron que los enfermos de asbestosis contraían -en el largo
plazo- un extraño tipo de cáncer pulmonar, llamado mesotelioma.
Muchos otros estudios -en diferentes países- confirmaron la relación
entre graves enfermedades y la exposición al asbesto.
Exposición
no solamente en las minas, sino también de los trabajadores de
fábricas que procesan el material. E incluso de las personas
expuestas al mineral en viviendas o demoliciones.
Después
del atentado contra las Torres Gemelas en el año 2011, las
autoridades sanitarias estimaron que miles de personas resultaron
gravemente enfermas; afectadas por la dispersión en el aire de
millones de toneladas de partículas de asbesto -y de otros
materiales- generados por el colapso de las torres.
Incluso la
muerte prematura del famoso actor de los años 70 -Steve McQeen- fue
atribuida a un cáncer de pulmón ocasionado por la inhalación de
partículas de asbesto; originadas en motores y trajes de asbesto que
usaba en carreras de carros y motos.
Por
lo mismo, desde los años 90 muchos países empezaron a restringir o
prohibir el uso de asbesto, que fue progresivamente remplazado por
otros materiales. En diferentes países se crearon asociaciones
integradas por víctimas del asbesto.
Una nota reciente de una
asociación francesa de afectados advierte: “a pesar de que el
amianto fue prohibido desde 1997 en Francia, todavía está presente
en empresas, lugares públicos, escuelas y muchos otros sitios”.
Ellos reportan expedientes de enfermos y muertos. Según la
Organización Mundial de la Salud 107.000 mueren cada año por
exposición laboral al asbesto.
En este contexto, no deja de
sorprender la reapertura -hace un año- de una mina de asbesto en
Campamento, Antioquia, cerrada desde al año 2010. Es la única del
país, hecho que ha despertado la alarma entre los entendidos. Como
siempre, las empresas aseguran que no existe ningún riesgo. Pero el
problema no son las empresas, sino las autoridades, que olvidan con
frecuencia que el Principio de Precaución está vigente en Colombia
desde la Ley 99 de 1993.
1 comentario:
He visto que en varias edificaciones tienen este terrible mineral que causa la asbestosis el gobierno deberia de mejorar las leyes contra esto.
Publicar un comentario