sábado, enero 29, 2011

Reforma inconstitucional a CAR no evitara desastres

Publicado en Vanguardia Liberal en enero 26 de 2011

La justificación para la reforma decretada por el Gobierno para las Corporaciones Autónomas Regionales (CAR) es que estas no cumplieron con sus funciones, en lo referente a las tragedias invernales. No voy aquí a defender a las CAR, a las que he cuestionado desde hace rato. Sin embargo, si vale la pena hacer algunas precisiones; no sea que el remedio resulte peor que la enfermedad. La ley 99 de 1993 dispone que “Para el manejo ambiental del país, se establece un Sistema Nacional Ambiental (SINA) cuyos componentes y su interrelación definen los mecanismos de actuación del Estado y la sociedad civil”.

Se designa al SINA (y no a una entidad en particular) ya que el origen de los problemas y desastres ambientales es múltiple y complejo; factores asociados al anti modelo de desarrollo. Si analizamos las tragedias ambientales, encontramos en sus raíces problemas de deforestación, mal uso del suelo, pobreza, carencias educativas, obras civiles mal parqueadas, violación a la legislación, entre otros. ¿Podemos –por ejemplo- responsabilizar a las CAR por el desastre social que obliga a millones en Colombia a vivir en zonas de riesgo?

La cabeza del SINA (ley 99) es el Min Ambiente, no las CAR. Y en lo relacionado con desastres, las funciones del Ministerio son claras (articulo 5º- numerales 35 y 41): “Promover, en coordinación con el Ministerio de Gobierno, la realización de programas y proyectos de gestión ambiental para la prevención de desastres” coordinando “las actividades del SINA y las del Sistema Nacional para la Prevención y Atención de Desastres”. ¿Donde están los programas y proyectos que ha promovido el Min Ambiente? Las CAR hacen parte del SINA y deben actuar (artículo 23): “de conformidad con las disposiciones legales y las políticas del Min Ambiente”, incluido el tema desastres.

Cuando un equipo de futbol pierde sistemáticamente, la responsabilidad se le atribuye al director y no a los jugadores que siguen las instrucciones del jefe. Por ello, en este caso, no se entiende por qué no se empezó a ordenar el asunto desde la cabeza. Sobre todo que el Min Ambiente fue herido de muerte durante la putrefacta administración Uribe y el proyecto de ley que cursa en el Congreso (que propone separar ambiente y vivienda, como estaba antes de Uribe) tiene serias deficiencias que ya se han señalado.

Reciclaje: alternativa a la extracción minera

Publicado en Vanguardia Liberal en enero 19 de 2011


Los recursos no renovables son aquellos que no se regeneran, como los combustibles fósiles y los minerales. Existen cantidades limitadas de los mismos, así que -en la medida que aumenta su consumo- tienden a agotarse, como lo advirtieron diferentes estudios desde los años 70. Simple sentido común. Durante el siglo XX se dispararon las extracciones de carbón, petróleo, gas y minerales (y se redujeron las reservas) por lo que fue necesario ir cada vez más lejos en los procesos extractivos. El petróleo inicialmente se producía sólo en tierra firme, pero en las últimas décadas las perforaciones se trasladaron a los mares, con las consecuencias conocidas. Con la minería pasa algo similar.

Estos crecientes impactos ambientales (y económicos) llevaron a muchos países a restringir la minería. Redujeron la minería interiormente… mientras aumentaban sus compras a países con menos controles ambientales. Por ejemplo, en el caso de las tierras raras (usadas en fabricación de imanes, láseres, superconductores y otros), varios países industrializados cerraron sus minas hace años (por problemas ambientales) y aumentaron sus importaciones de la China, que hoy tiene el 95% de la producción mundial. Pero, los chinos últimamente se pellizcaron y bajaron dramáticamente (72% el año pasado) la producción de 17 metales esenciales para industrias de alta tecnología; también por razones ambientales.

Estas medidas tienen aterradas a las empresas tecnológicas pues los precios de estas materias primas se treparon al techo. Por ello las Naciones Unidas formulo un llamado a desarrollar procesos de “reciclaje de 17 metales estratégicos; un mercado que está por construir pues sólo se recicla el 1%”. La situación ha llevado a un primer plano mundial a especialistas del reciclaje, como el químico alemán Wolfram Palitzsch, quien montó una fábrica para extraer metales estratégicos de aguas residuales, paneles solares o bombillas desechadas.

Estamos en mora de realizar debates sobre este tipo de alternativas productivas generadoras de buenos empleos; ya que nos pretenden vender la idea de que la única opción que tenemos es acabar con los páramos, el agua y las posibilidades de negocios eco turísticos. Todo, por las migajas que dejan caer de la mesa las mineras. Sin considerar que el verdadero negocio es la valorización (y el reciclaje) de los minerales todos, no solo del oro y la plata. A propósito ¿Qué otros metales pretende llevarse la Greystar de Santurban?

¿Desaparecen las playas de Cartagena?

Publicado en Vanguardia Liberal en enero 12 de 2011

Todos los finales de año viajo a Cartagena –mi ciudad natal- a visitar mis parientes y pegarme un chapuzón en las aguas del mar Caribe. Esto último ya poco lo hago pues las playas cercanas a la ciudad resultan poco atractivas para los bañistas. Aguas turbias y mucha basura en playas de arenas oscuras. Cada vez la cosa esta peor, el pasado diciembre observe varias playas del norte de la ciudad (desde Crespo hasta la Boquilla) cubiertas por toneladas de basura flotante; compuesta por residuos de madera, algas, maleza de agua dulce y otros desechos. Supongo que parte de este material se origina en los residuos que vomita el rio Magdalena al mar Caribe en Bocas de Ceniza, Barranquilla. De allí la deriva litoral dispersa los residuos en las playas turísticas.

Para rematar: en esta masa de desechos orgánicos se reproduce una especie de jején, insectos pequeñísimos que atacan con ferocidad las piernas de nativos y turistas, en las primeras horas de la mañana.

Más allá de estos y otros problemas sanitarios de las playas de Cartagena (problemas que limitan su uso) otro hecho inquietante es que las mismas tienden a desaparecer. En gran medida, por el aumento del nivel del mar relacionado con el cambio climático; pero también por la ejecución de vías que han recortado las playas y permitido el avance de las edificaciones hacia la línea costera. En todo caso el aumento del nivel del mar se hace más perceptible cada año que pasa.

Conozco estas playas como la palma de mi mano, las camino desde que era niño y las visito todos los años. De ahí que estos 60 últimos años he podido apreciar, en vivo y en directo, su evolución negativa. De las playas limpias, bellas y muy extensas de mi niñez ya no queda casi nada.

El aumento del nivel del mar constituye ya una amenaza para muchas casas de Crespo y Marbella, las olas golpean directamente sus cimientos; en la isla de Tierrabomba la cosa esta grave. En Bocagrande el panorama no es mejor. Muchos hoteles y restaurante –grandes y pequeños- intentan mantener sus playas en forma artificial gracias a murallas y espolones de piedra y rellenos de arena. Playas artificiales, todo lo cual nos confirma que el cambio climático no es una pesadilla futurista sino un incierta realidad de hoy.