viernes, agosto 26, 2011

La amenaza de las especies invasoras

Publicado en Vanguardia Liberal en agosto 24 de 2011

Hace varios meses la prensa viene informando sobre la presencia del temible pez león en diferentes países que cuentan con playas en el Mar Caribe, incluido Colombia. El pasado 30 de julio El Universal de Cartagena informó sobre la captura de "10 especímenes de pez león en las playas de Punta Canoa, Bocagrande, Tenazas y Marbella".

Según el Director de Cardique (autoridad ambiental) este pez tiene un poderoso veneno en sus aletas dorsales que ocasiona: "dolor, nauseas, parálisis en extremidades y efectos cardiovasculares". El pez se considera además "una amenaza para las especies nativas". El depredador también ha sido avistado en las playas de Taganga, el parque Tayrona, las Islas del Rosario y San Andrés y Providencia.

El pez león tiene una apariencia muy extraña y es originario de los océanos Pacífico e Indico. ¿Cómo llegó al océano Atlántico? Se cree que los primeros ejemplares fueron liberados en las playas de la Florida en 1992; cuando el huracán Andrew destruyó un acuario y escaparon seis ejemplares. En el Atlántico, estos se reprodujeron y colonizaron en unos pocos años los arrecifes y lagunas costeras de la región. Los estudioso consideran que actualmente su erradicación es imposible y recomiendan estimular el consumo de su deliciosa carne entre la población.

El pez león es solo una de las numerosas especies invasoras que inquietan a las autoridades ambientales y sanitarias. Muchas otras especies de plantas, insectos, crustáceos, hongos y aves están siendo trasladadas por las actividades humanas fuera de su hábitat natural. Hace poco se reportó que un cangrejo gigante (1.50 metros de envergadura) fue avistado fuera de su hábitat natural, el fondo del océano, debido al calentamiento global.

Muchas especies son trasportadas por los 50.000 barcos mercantes que arrojan sus aguas de lastre en puertos diferentes al de partida. Otras especies son transportadas en aviones y otras más por coleccionistas. Muchas invasiones de especies se registraron antes de la aparición de Homo sapiens sobre la tierra; muchas otras fueron trasladadas por los humanos antes del siglo XX. Por ejemplo, casi todas las plantas y los animales domésticos que hoy consumimos.

Sin embargo, la magnitud y rapidez de desplazamiento de las especies en las últimas décadas no tienen antecedentes conocidos. De ahí que los efectos de esta masiva invasión de especies exóticas representan hoy un gran interrogante para los científicos.

domingo, agosto 21, 2011

¿Hidrosogamoso desecará ciénaga El Llanito?


Publicado en Vanguardia Liberal en agosto 17 de 2011

La semana pasada me reuní con representantes de la comunidad de pescadores del corregimiento El Llanito de Barrancabermeja. Se trata de "un conglomerado de cerca de 3000 personas, cuya principal fuente de sustento es la pesca artesanal en la Ciénaga El Llanito. Los problemas en esta y otras ciénagas del Magdalena Medio empezaron hace muchos años; como quedó reseñado en el libro La Crisis del Agua en Santander (Puente y asociados, Inderena, 1993). Sin embargo, en todos estos años que han pasado no hemos hecho nada para recuperar este y otros sistemas amenazados. Todo lo contrario, estamos empeñados en su destrucción total.

Los pescadores advierten que son dos factores los que amenazan la "única fuente de sustento y supervivencia de nuestras familias". Y sí, para ellos, es cuestión de supervivencia. Estos factores son: 1) "Graves problemas de contaminación asociados a la industria petrolera", es decir, vertimientos petroleros que afectan la calidad del agua de la ciénaga. 2) "Inminente riesgo de desecación de la ciénaga a causa del represamiento del Río Sogamoso".

De estos dos problemas, el primero podría ser más fácil de solucionar; siempre y cuando exista la voluntad de las petroleras y la decisión de las autoridades ambientales para exigirles un plan de manejo ambiental a los responsables. En el caso del represamiento parcial del Sogamoso, debido a su desvió en el sitio de construcción de la represa, la cosa parece más complicada. Después de este desvío en enero, se han presentado desbordamientos que sugieren que los túneles instalados no son suficientes para evacuar todo el caudal del Sogamoso. Y si ya hay problemas en la Ciénaga con este represamiento parcial ¿qué ocurrirá durante el llenado de la represa cuando la retención de agua sea mucho más importante?

Esta ciénaga se abastece de las aguas del río Sogamoso; por lo mismo menos agua le llegará al Llanito al bajar el nivel del río cuando la represa entre en operación. Esto en una ciénaga que ya tiene problemas de sedimentación y pérdida de profundidad. Así que Hidrosogamoso podría "asestarle un golpe mortal a la ya agonizante ciénaga" escribí en una columna de febrero 2009.

Si la ciénaga desaparece ¿qué será de los pescadores de El Llanito? ¿Más desplazados en un país que ya cuenta con el vergonzoso título de subcampeón mundial de desplazamiento interno?

lunes, agosto 15, 2011

PETROLEO EN EL PARAISO

Publicado en Vanguardia Liberal en agosto 10 de 2011

Los pescadores venezolanos del Golfo Maracaibo están muy preocupados por las manchas de petróleo que afectan los cangrejos azules; crustáceo de vivos colores apetecido en el mercado internacional, donde una libra de su carne puede costar 40 dólares. Se trata de un problema de vieja data. "Las filtraciones de petróleo son constantes y el gobierno no tiene capacidad para ocuparse de ellas; valiosos ecosistemas están siendo dañados", advierten ambientalistas venezolanos. El desastre ocurrido en el Golfo de México hace un año, desatado por un derrame de cinco millones de barriles de crudo de la British Petroleum, ocasionó pérdidas incalculables al ambiente y la economía de la región. Es otro ejemplo de los enormes riesgos asociados a la explotación de petróleo en el mar.

Por supuesto que no sólo el petróleo, sino también el transporte de carbón puede ocasionar graves daños a las playas; como lo pueden testimoniar los visitantes a algunas "playas grises" de Santa Marta, afectadas por los puertos de carbón.

La preocupación aumenta cuando la explotación petrolera se pretende realizar en una Reserva de la Biosfera, como es el Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina (Seaflower), reconocida como tal por la UNESCO en el año 2000.
Por lo mismo, están prendidas todas las alertas frente a la pretensión de la Agencia Nacional de Hidrocarburos de iniciar exploraciones de hidrocarburos en estos paradisiacos lugares. Proyecto que cuenta con la oposición de los raizales y también de CORALINA (Corporación para el Desarrollo Sostenible del Archipiélago) que -hace unos días- instauró una Acción Popular contra la Agencia de Hidrocarburos. Esta Corporación había expresado su preocupación porque dos bloques adjudicados hacen parte del Área Marina Protegida, donde no está permitido "ningún uso que no sea compatible con los objetivos de conservación de la biodiversidad que inspiraron su declaratoria".

Como en el caso Santurban, el gobierno pretende pasarse por donde sabemos la legislación ambiental nacional, los acuerdos internacionales y el sentido común. Todo por un supuesto "modelo de desarrollo" que solo le ha traído al país más deterioro ambiental y social y dependencia económica. Es precisamente ese deterioro social que explica la presencia creciente de bandas criminales en San Andrés, mal que afecta en menor medida a Providencia que ha preservado su forma de vida tradicional basada en la pesca y el ecoturismo, amenazados hoy por la lujuria petrolera.

jueves, agosto 04, 2011

EL VIAJE DE CELIA CRUZ Y JOE ARROYO

Publicado en Vanguardia Liberal en agosto 3 de 2011

Para los salsómanos la partida del Álvaro José Arroyo es comparable a la de Celia Cruz. Algunos sostienen que Joe era la versión masculina de la Guarachera de Cuba; tanto por su versatilidad como por su poderosa voz. El cartagenero fue también un compositor impresionante. En el mismo sentido, ambos se inclinaban a interpretar canciones con contenido.

Según Joe, la canción que le dio renombre mundial fue la famosa Rebelión; que cuenta la historia vivida (año 1600, Cartagena) por un matrimonio africano, esclavos de un español. Este último, a la negra le pegó y el negro guapo se rebeló. Y aún retumba su clamor: No le pegue a mi negra. Celia, por su parte, en Que le den candela lanza una graciosa diatriba contra los hombres que maltratan a las mujeres. Una epidemia en la Colombia de hoy, todos los días leemos en la prensa sobre mujeres torturadas o asesinadas por sus compañeros. Para este hombre Celia pide: Que le den candela. Que le den castigo. Que lo cuelguen de una cometa y que luego corten el hilo.

Si bien ambos tuvieron coincidencias en su vida profesional, su vida personal fue muy diferente. Celia vivió cerca de 80 años (hace poco se cumplieron ocho años de su muerte), con un matrimonio estable con Pedro Knight, su compañero de una vida sin vicios. A diferencia del Joe, fallecido a los 56 años después de una travesía tormentosa y una salud minada por las enfermedades y los excesos; sobre todo de las drogas duras.

Tal vez por ello, mientras la vida de Celia se apagó tranquilamente y rodeada de sus familiares, Joe tuvo una muerte difícil, en medio de graves padecimientos físicos y escándalos salpicados por terribles acusaciones entre familiares y allegados.

Celia y Joe viajaron al cielo de los buenos cantantes y compositores; donde seguramente comparten una tarima celestial con otros grandes de la música afroamericana que los precedieron. Bajo la batuta de Mi Dios, el bendito papa, como le decía Joe.

Vivimos en un mundo todavía poblado por algunas personas intoxicadas de prejuicios, intolerancia y hostilidad. Para ellos, para aquellos que solo critican, para aquellos que usan las armas, para aquellos que nos contaminan. A ellos Celia les dedica la canción La vida es un carnaval; en la que las penas se van cantando