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miércoles, enero 13, 2010
Frio y lluvia en Europa, calor y sequia en Colombia
Publicado en Vanguardia Liberal en enero 13 de 2009
Desde diciembre los medios informan sobre las temperaturas glaciales que azotan los países europeos. Los estudiosos consideran que -por lo prolongado del evento- se trata de una anomalía climática que afecta a Europa y América del Norte (oscilación negativa). Temperaturas bajo cero, brisas heladas, nieve y lluvia, se registran incluso en zonas donde son muy raras las nevadas.
La cosa podría agravarse, ya que se anuncia que el frío extremo continuara (no se sabe muy bien hasta cuando). Fotografías aéreas muestran países enteros completamente cubiertos de nieve. Esto ha generado problemas en los aeropuertos y las vías por la formación de capas invisibles de hielo, sobre la que patinan los vehículos, es lo que los franceses llaman el peligrosísimo “verglas”.
Al mismo tiempo Colombia y otros países de América Latina padecen sequías asociadas a temperaturas infernales, que se atribuyen al Niño. Sin embargo, el clima es un asunto muy complejo en el que es difícil separar un fenómeno de los demás. “Todo esta enlazado”, sentenciaba el Jefe Indio Noah Sealth. Existen cambios climáticos “naturales” que han ocurrido desde siempre, mucho antes de que el microbio humano aterrizara sobre la tierra. Épocas glaciales muy frías y periodos interglaciares, como el que vivimos hoy día. Pero también es cierto que las acciones humanas podrían interferir en estos ciclos, neutralizándolos o potenciándolos.
Por ejemplo, un aumento de las partículas sólidas en la atmósfera tiende a enfriar el planeta, mientras que un aumento de gases de invernadero lo calienta, como lo planteo Svante Arrhenius en 1896. El mismo calentamiento global podría generar brutales enfriamientos en algunas regiones de la tierra. Los posibles efectos del calentamiento global sobre El Niño y La Niña fueron analizados hace 20 años, por cientificos como el astrofísico John Gribbin, en su libro La Tierra Invernadero.
Es –por lo tanto- muy difícil predecir que pasara en los próximos años, de ahí que lo importante es preparase para anomalías climáticas extremas. Si el cambio climático llega a una cuenca protegida, los efectos serán menos graves que si se registra sobre cuencas desvastadas, como las nuestras. Sin lugar a dudas, a los países que ya se preparan para posibles cambios climáticos les ira mejor. No es el caso de Colombia, que anda enredada en polémicas ridículas como es la reelección de la joyita paisa. El mismo que acabo con el Ministerio de Medio Ambiente y sepulto la legislación ambiental.
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