jueves, marzo 14, 2013

PROXIMO VIERNES: CIEN MIL VOCES POR EL AGUA

Publicado en Vanguardia Liberal en marzo 13 de 2013

En  enero 8 de este año fue declarado el Parque Regional Santurban. Según las “autoridades”, esta declaratoria garantiza el abastecimiento de agua para Bucaramanga y su área metropolitana. Sin embargo, en enero   17  la minera Eco Oro (Ex-Greystar) anunció que la mencionada declaratoria: “no impide el desarrollo del Proyecto Angostura”, y su acción subió 125 %. Seguirá, no por la derrotada explotación a cielo abierto, sino con minería subterránea. Hay que  precisar que este proyecto está en un 90% fuera del parque  (¿delimitado a su medida?) pero no está fuera del páramo y en los páramos están prohibidas  actividades  “de exploración o explotación de minerales”. Es lo que establece –entre otros- el Plan Nacional de Desarrollo (ley 1450 de 2011) 
Que Eco Oro y otras mega-mineras siguen realizando actividades en páramos  lo confirma el concepto técnico 503 de 2012 de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA). ¿Por qué siguen ahí estas mineras si la ley lo prohíbe? El pretexto  es que los páramos en Colombia no han sido delimitados y que, mientras  eso no ocurra, no se puede hacer nada. Pero, como ya lo he señalado en  columnas anteriores, la directora del Von Humboldt (Semana, 12 enero 2013) afirma que sí están delimitados: “Colombia cuenta con un Atlas de Páramos adoptado legalmente en 2011, que define límites, los identifica y ubica”.  

Un lector me comentaba que la ley 1450 derogó la resolución 937 de 2011 (que “identifica y delimita” los páramos). Sin embargo, la ley 1450 más bien ratifica lo que dice la 937. Además, el concepto 503 es posterior a la ley 1450 de 2011 y este concepto oficial se basa en la resolución 937.

Ahora, las restricciones legales no solo tienen que ver con páramos y parques. También están -por ejemplo- los permisos de uso de agua y vertimientos ¿Por qué se siguen otorgando permisos y concesiones de agua sin conocer el índice de escasez (balance entre oferta y demanda) y modelación matemática  de los ríos afectados? Entonces, para solicitarles cordialmente a las autoridades que cumplan y hagan cumplir la ley,  el Comité de defensa del agua y del páramo y el Movimiento Conciencia Ciudadana citan a la  movilización Cien Mil Voces por el Agua. Marzo 15,  2 pm,  Puerta del Sol.

 

miércoles, marzo 06, 2013

“PUEBLOS DEL CANCER” EN CHINA ¿Y EN COLOMBIA?

Publicado en Vanguardia Liberal en marzo 6 de 2013

El pasado 22 de febrero el gobierno de la China aceptó -por primera vez- que existen en ese país cientos de pueblos clasificados como “Aldeas del cáncer” (Cáncer Villages). Calificativo aplicado desde años atrás a pueblos chinos que registran altísimos niveles de contaminación y un número atípico de casos de cáncer. La novedad ahora es que las autoridades chinas (por fin) admitieron los graves peligros para la salud humana que representan las emisiones y vertimientos industriales que han contaminado el aire, las aguas y los suelos.

Muchas de las sustancias  usadas fueron prohibidas en los países avanzados desde hace rato, solo ahora el gobierno anuncia que prohibirá inmediatamente una docena de estos tóxicos (Huffington Post). Ojo, pues, con los productos chinos: baratos pero de cuestionada calidad.

El problemita está relacionado con los métodos chinos de producción. En el 2007  El Mundo.es publicó una nota titulada “Muertos de cáncer por el Made in China”. Y agregaba: “El hedor te asalta al aproximarte a una de estas aldeas, desbordadas de contaminación por industrias que fabrican muy barato para Occidente”.

Los bajos precios de los productos chinos, que hoy inundan los anaqueles de todos los países del mundo, se explican en gran parte por los pocos o nulos controles ambientales y por las –en muchos casos- inhumanas condiciones laborales. El Mundo.es anotaba en 2007 que, en algunos casos extremos, “poblaciones enteras han abandonado sus pueblos, provocando un nuevo tipo de desplazados nunca antes visto: los refugiados de la polución”

Pues bien, guardadas las proporciones, en Colombia ya se empiezan a presentar este tipo de desplazamientos por contaminación.

Por ejemplo, el Ministerio de Ambiente estableció en sus resoluciones 970  y 1525 de 2010 que las empresas Drummond, Prodeco y otras empresas carboneras establecidas en el departamento del Cesar: “tienen la obligación de  reasentar a las poblaciones  de Plan Bonito, El Hatillo y Boquerón”. El Ministerio advierte: “se puede observar que las poblaciones que han venido presentando mayor afectación por la contaminación atmosférica son Plan Bonito, La Loma, Boquerón, El Hatillo y La Jagua Vía; por lo que se puede concluir que el área minera del Cesar presenta índices de contaminación alta que pueden afectar la salud de la población asentada en el área de influencia de las  mineras”.

 

 

 

LA MARIHUANA NO ES DROGA “SUAVE”

Publicado en Vanguardia Liberal en febrero 27 de 2013

El pasado mes de enero, en el contexto del debate sobre “despenalización” de drogas sintéticas, el senador Roy Barreras advirtió que el  “gran problema de Colombia con relación al narcotráfico está vinculado con las drogas suaves, como la marihuana y la cocaína” (Caracol Radio). Vale la pena hacer algunas precisiones, pues la clasificación entre drogas “suaves” y “duras” es cuestionada  pues es como decir blanco y negro, ignorando los matices.

Para completar, en las escalas basadas en estudios académicos que clasifican las drogas, la cocaína no se encuentra en la misma categoría que la marihuana. (Entre otros, David Nutt y asociados, revista médica The Lancet, 2007). En esta escala, la cocaína es considerada mucho más dañina  que la marihuana en términos de dependencia y daños físicos ocasionados.  Se incluyen otras, en categorías intermedias, como el alcohol y algunas  drogas sintéticas. (Development of a rational scale to assess the harm of drugs of potential misuse, Revista médica The Lancet, 2007, 369: 1047–53). 

No parece entonces conveniente meter en la misma canasta a la marihuana con la cocaína. Más peligrosa que la cocaína  es el basuco, llamada la droga de los pobres, a la que ya he hecho referencia en este espacio (Ventajas de legalizar drogas ilegales, Noviembre 2011). Esta no  aparece en listados académicos pero es fabricada masivamente con residuos de cocaína y otras porquerías químicas en las ollas que proliferan en las barriadas pobres de las ciudades colombianas.  De tal manera que hablar de drogas “suaves” o “duras” es simplificar en extremo un tema muy  complejo.

En el caso de la marihuana, se considera que sus efectos son menos nocivos que otras pero esto no significa que no genere ningún efecto nocivo. Por ejemplo, la revista de divulgación científica  francesa Science y Vie (febrero de 2013) presenta una revisión de los efectos de la marihuana sobre la salud; sobre todo  para personas que empiezan a consumirla en la adolescencia. Se citan estudios que asocian su consumo con la esquizofrenia, la depresión, la disminución de las capacidades intelectuales e incluso con aumento de cáncer de testículo.

La profesora Daniela Parolaro de la Universidad de Insubria (Italia) concluye: “La evidencia epidemiológica sugiere que el consumo de cannabis es un factor de riesgo para la esquizofrenia y contribuye a la exacerbación de los síntomas y al empeoramiento del pronóstico en individuos con predisposición”. (Consumo de cánnabis de los adolescentes y esquizofrenia: Evidencias epidemiológicas y experimentales, Adicciones, 2010 · vol. 22 núm. 3).
 
El neurotoxicólogo de la Universidad de Utrecht, Raymond Niesink, explica por su parte que  “el consumo de cannabis durante la adolescencia puede perturbar el desarrollo de la corteza prefrontal, y por lo tanto puede llevar al desarrollo de trastornos psicóticos y síntomas psicóticos”. (Revista científica Progress in Neurobiology,  2010 Jul 15).
 
Otros estudios  relacionan el consumo de marihuana con la depresión, la disminución de las capacidades intelectuales (Science & Vie, febrero 2013) e incluso con aumento de cáncer de testículo (http://www.cancer.org/cancer/news/news/study-links-marijuana-use-to-testicular-cancer).

Publicaciones de este año sugieren  que “Fumar marihuana puede aumentar el riesgo de accidente cerebrovascular en adultos jóvenes” (CBS News, febrero 2013). “El cannabis ha sido considerado por el público como una droga relativamente segura, aunque es una sustancia ilegal", advirtió el Dr. Alan P. Barber, profesor de neurología clínica de la Universidad de Auckland en Nueva Zelanda, en un comunicado a la Asociación Americana del Corazón. Y añade "Este estudio muestra que podría  no ser el caso, ya que puede provocar un accidente cerebrovascular". http://www.cbsnews.com/8301-204_162-57567943/marijuana-smoking-may-increase-stroke-risk-for-young-adults/

Sea como fuese -drogas duras, blandas o intermedias- el caso es que,  como ya lo han señalado numerosos especialistas, la estrategia represiva fracasó. Lo que los adictos necesitan es asistencia médica y apoyo familiar, no cárcel, como propone la caverna nacional.  Ahí sí que el “remedio” resulta peor que la enfermedad.